M&A
EEUU
The Daily
Oct22,2016
Los acuerdos aprobados en fines de semana, grandes, medianos o pequeños, ya no duermen a la espera de la madrugada de lunes para revelarse. Probablemente buscando un impacto inmediato en la primera hora bursátil de este lunes 24, AT&T apuró sin dilaciones el sábado el mayor anuncio de los últimos años en el mercado más poderoso de la industria audiovisual mundial, y la operación empresarial más importante del año, que rebasa largamente los US$ 66.000 millones pagados por Bayer para hacerse de Monsanto.
Como si hubiese sido insuficiente la multimillonaria inversión en la americana DirecTV, la Telco decidió doblar la apuesta 2016 para dejar de ser simplemente un ducto, una vía, de los contenidos de otros. Ahora ha ido directamente al grano por el alimento fundamental de sus negocios de TV paga en EEUU.
En una operación que está valorada en alrededor de US$108.700 millones, incluyendo la deuda, AT&T dio el primer paso para la compra del tercer conglomerado de medios y entretenimiento del mundo, solo superado por Comcast y Disney. La cifra está valorando a Time Warner en un monto cercano a los US$ 85.400 millones, es decir cerca de 107,5 dólares por título, 50-50 en efectivo y acciones. Al monto comprometido a pagar le debe sumar una deuda de US$ 24.000 millones de deuda.
Time Warner se conformó cuando Warner Communications y Time Inc, más una tercera empresa, Turner Broadcasting System, decidieron fusionarse para reunir el mayor activo de operaciones en cine, televisión y publicaciones a nivel mundial.
Además de las poderosas programadoras de TV paga, HBO y Turner, Time Warner es dueña de New Line Cinema, The CW, Warner Bros, Warner Bros. Animation, DC Comics, Cartoon Network Studios y Castle Rock Entertainment.
Tras aquella fusión, su lista de propiedades incluía Time Warner Cable, America On Line y Time Inc. pero en 2009 se decidió escindirlas del conglomerado y convertirlas en empresas independientes del grupo.
La jugada de AT&T es audaz porque se hace en un contexto poco propicio, por sus niveles de deudas tras el desembolso de los US$ 48.500 millones por DirecTV. También complica el momento político del país que hace imprevisible, de momento, hablar de fechas de análisis del M&A. Otro aspecto que no hace fácil el aval regulatorio es la megafusión duplicada de la Telco: primero el mayor grupo DTH del mundo, y ahora una de las tres mayores fábricas de contenidos del país. Los analistas entienden que allí puede estar el talón de Aquiles de la operación sabatina: no son compras aisladas; son claramente complementarias.