Estudio
EEUU
The Daily
Nov19,2018
¿Podrán las neurociencias y la inteligencia artificial predecir si determinado programa de televisión será o no un éxito?
Algo que de momento parece inverosímil (pues tantos son los factores que pueden condicionar la recepción de un show televisivo), no lo es para investigadores que desarrollan las neurociencias inmersivas.
Tecnología reciente desarrollada por la compañía Inmersive Neuroscience (IN) ha permitido crear un denominado neurotracker. El dispositivo portátil se enfoca en cómo los seres humanos reaccionan a los medios. Desde un contenido de video hasta una inmersión en vivo, el rastreador determina cómo la gente va respondiendo ante determinados estímulos, informa en una publicación Edgy Labs, compañía basada en Houston, Texas.
El neurotracker se amarra en el antebrazo de una persona a fin de medir su ritmo cardíaco. Esto permite al dispositivo medir la liberación de oxitocina, hormona asociada con los vínculos y la empatía (suele llamársela “hormona de los abrazos”), esto es, con todo lo relacionado a la conexión humana.
El dispositivo actúa en tándem con la Inmersion Neuroscience Platform, cuyo software ayuda a los usuarios a interpretar datos utilizando algoritmos de coeficientes de inmersión.
Como resultado de esta relación sólida con la conexión, un dispositivo así, que monitorea la inmersión humana, cuaja naturalmente con el mundo de la ciencia de los datos, el marketing y el compromiso con marcas.
El propio CEO y cofundador de IN, Paul Zak, es referenciado como “neuroeconomista”. Él apalanca las neurociencias con el objeto de predecir cómo las reacciones químicas de las personas afectan sus decisiones económicas.
Al monitorear la producciòn de oxitocina, IN ha mostrado que su neurotracker tiene una tasa de éxito de entre 75% y 90% para predecir si determinada conexión emocional puede o no traducirse en compra/adopción luego de la experiencia.
Aquí es donde, de acuerdo con la publicación, entra en juego la relevancia de esta tecnología para predecir si un piloto de TV será o no un éxito.
Claro que si todo se redujera a medir bajo un enfoque conductista la liberación de hormonas, ¿en qué lugar queda la expertise de los profesionales de medios, el olfato de los productores, la creatividad, el talento y las insondables disposiciones de las audiencias? En tal sentido, los recientes hallazgos neurocientíficos y de IA aparecen como un novedoso y prometedor recurso más.