Proyecciones
Global
The Daily
Feb5,2025

Aunque el nivel de inversión viene ralentizado, parece inevitable el rebase dada la velocidad de los cambios estructurales que viven los negocios audiovisuales. Según las proyecciones de Ampere Analysis, una de las empresas más reconocidas en estudios de mercado de la industria, ese rebase acontecerá en 2025: en el año en curso el gasto de los servicios de VoD estaría aumentando 6% para alcanzar los US$ 95.000 millones. Si eso acontece, por primera vez en la historia audiovisual las empresas de streaming superarán a los broadcasters comerciales en gastos en contenidos.
El exitoso crecimiento de los suscriptores de los servicios de streaming en 2024, motorizado principalmente por las restricciones para compartir contraseñas y por los derechos recién adquiridos para eventos deportivos clave, los ha posicionado para realizar desde este año grandes inversiones en contenidos. En general, los servicios de streaming financiados con publicidad y basados en suscripciones representarán el 39% del gasto global total en 2025, proyectan en Ampere.
En comparación, los broadcasters comerciales estadounidenses están reduciendo el gasto después de un año de mayor inversión impulsada por las elecciones presidenciales y los Juegos Olímpicos de verano. Pero más allá de estos eventos puntuales, la disminución del gasto en contenido refleja una tendencia más amplia observada en los últimos cinco años, ya que las emisoras de televisión convencionales enfrentan desafíos críticos en cuanto a ingresos publicitarios vinculados por la creciente disminución de la audiencia lineal. Fuera de EEUU, los broadcasters comerciales siguen demostrando una mayor resiliencia y mantienen su inversión en contenido durante 2025. Pero en general, un mercado publicitario moderado hará que la participación general de las emisoras lineales en el gasto global caiga al 37%, por debajo del 39% constatado en 2024, subrayan en Ampere.
El continuo crecimiento del gasto en VoD, combinado con la perspectiva más cautelosa de los transmisores lineales, resalta el papel cambiante de la televisión tradicional a medida que la demanda de los espectadores se dirige cada vez más a las plataformas digitales y al streaming.